La noche del 5 de junio de 2025 quedó grabada en la historia de la gastronomía mundial y en el corazón de todos los peruanos. Maido, el restaurante fundado por Mitsuharu Tsumura en Lima, fue elegido como el mejor restaurante del mundo en el prestigioso ranking de The World’s 50 Best Restaurants. La noticia desató una ola de celebración, emoción y orgullo nacional. La cocina nikkei llegó a lo más alto del podio gastronómico global y lo hizo con sabor peruano.
El ascenso de Maido: años de constancia y pasión
Este reconocimiento no es fruto del azar. Durante 11 años, Maido ha mantenido una presencia firme en el ranking mundial. Su evolución constante, la fidelidad a su esencia y la innovación permanente lo fueron posicionando entre los favoritos de la crítica y el público. La cocina nikkei, que fusiona las tradiciones culinarias japonesas y peruanas, se consolidó como una expresión poderosa de creatividad, técnica y cultura.
Detrás del éxito está la visión de Mitsuharu Tsumura, también conocido como Micha. Con 43 años, ha liderado un equipo que no solo cocina, sino que crea experiencias emocionales. La filosofía de Maido es clara: hacer feliz a la gente. Y esa meta se refleja en cada plato, en cada gesto de hospitalidad, en cada detalle del servicio.
El impacto de ser el mejor restaurante del mundo
Ser elegido como el mejor restaurante del mundo es más que un galardón. Es una responsabilidad y una declaración de principios. Maido representa al Perú y a toda Latinoamérica en la cima de la gastronomía. Este logro reafirma el lugar privilegiado que ocupa la cocina peruana a nivel internacional. No es la primera vez que un restaurante peruano alcanza la cima, pero cada victoria fortalece la imagen del país como potencia culinaria.
La distinción también trae consigo un nuevo nivel de exposición. El interés por conocer Maido crece, al igual que la demanda por explorar la cocina nikkei. El restaurante se convierte en destino obligado para viajeros gourmet, periodistas especializados y amantes de la buena mesa. En términos de turismo gastronómico, esta elección puede tener un efecto multiplicador.
Un equipo, una familia
Uno de los pilares de Maido es su equipo. Más que un grupo de trabajadores, es una familia unida por la pasión de servir y crear. Muchos de ellos llevan más de una década trabajando codo a codo. Esa estabilidad y compromiso se sienten en el ambiente del restaurante y en la precisión con que cada servicio es ejecutado.

Fuente: Cosas Perú
El reconocimiento al mejor restaurante del mundo es un logro compartido. Cada miembro del equipo ha puesto su talento y energía al servicio de una experiencia que va más allá de la comida. La emoción que vivieron al escuchar el nombre de Maido en la ceremonia fue el reflejo de años de esfuerzo conjunto.
La cocina como fuerza unificadora
Maido también simboliza algo más profundo: la capacidad de la cocina para unir. Hoy más que nunca, la gastronomía peruana es motivo de orgullo nacional. Su diversidad, riqueza y creatividad despiertan admiración en el mundo. Y es también una herramienta de transformación social, de integración y de desarrollo económico.
El mejor restaurante del mundo no solo sirve platos memorables. También inspira, educa y genera nuevas oportunidades. Mitsuharu Tsumura y su equipo han demostrado que el sueño de llegar a la cima puede hacerse realidad desde Latinoamérica, con identidad y con pasión.
Lo que viene después
Ahora, con el título del mejor restaurante del mundo, Maido inicia una nueva etapa. El reto es mantenerse, seguir sorprendiendo y continuar evolucionando. La curiosidad, el perfeccionismo y el deseo de conectar con las personas seguirán siendo sus guías.
La historia de Maido es inspiradora para nuevas generaciones de cocineros y emprendedores. Demuestra que la excelencia nace del trabajo constante, de la coherencia con los valores y del amor por lo que se hace.
En el mapa mundial de la gastronomía, Maido brilla con luz propia. Y Perú, una vez más, celebra que su cocina sea reconocida como una de las mejores formas de contarle al mundo quiénes somos.
